viernes, 25 de marzo de 2011

BARCELONA

4 de abril y 5 de abril:

La jornada inició con un riquísimo desayuno frances. Había para elegir de todo, y todo de buena calidad. Tuvimos la suerte que dos compañeros del grupo, viendo la desesperación reinante del grupo por tomar asientos, nos guardaron sitio en los asientos de siempre, los penúltimos del fondo. El aliciente del día era saber que, al fin del mismo, ya no tendríamos que compartir màs con la horda de selfishs.

El camino fue largo, de aproximadamente 700km, y sin paradas para visitas. Sólo nos detuvimos para el uso de los servicios, y para el almuerzo.

Por la tarde, llegamos a Barcelona. El plan del tour, era, como ya contè, ir tocando ciudades, con el objetivo final de llegar a Madrid, para el término del viaje. Estos últimos días, eran sólo de pasada, con poca chance de conocer. Así fue en Niza, que no tuvimos ocasión de ver. En Barcelona, nos hicieron una visita panorámica, por los sitios màs emblemàticos, y 15 minutos para ver la Sagrada Familia, desde debajo del bus. Allí fue que agradecí haber decidido terminar el tour un día antes: esta ciudad es fantástica, y las cosas para ver lo son màs, y no me hubiese perdonado no haberla visitado. El hotel que nos tocò en esta ocasiòn, si bien está alejado del centro, es muy hermoso, con muy buen nivel, super confortable, y muy bien comunicado, con el tranvia, y luego el metro para llegar al centro.

En el hotel, cenamos y dormimos, para hoy hacer las recorridas por nuestra cuenta, a puro metro.

Hoy empezamos el lunes con el desayuno en el Hesperia Sant Just, el hotel designado, en el que decidimos quedarnos por las nuestras una noche màs. A partir de allì, nos subimos al tranvìa, e iniciaron las combinaciones de transporte. La nota de color es que, contratando el hotel por Internet, era más económico que hacerlo por mostrador, razón por la que pedimos la clave de la web, y desde la comodidad de la habitación, recontratamos la misma para el día siguiente. Sólo restó aclarar en el mostrador que querríamos conservar el mismo cuarto.

La primer parada: la Sagrada Familia, segundo round. Esta vuelta, formamos la grandísima fila que había en la puerta, la que inicia desde la fachada trasera, la de la Pasión. Si bien éramos muchísimos, la fila avanzó bastante rápido, y al rato, estábamos dentro, con las audioguías colgadas en las orejitas. Tengo que mencionar que éstas, fueron las mejores audioguias de todas las visitas que hemos hecho. Realmente bien organizada, con las referencias colocadas oportunamente, buenas explicaciones, y muchos datos agregados.

Fachada principal, o de la Natividad, en la Sagrada Familia de Antoni Gaudí
La sorpresa del templo fue al entrar, donde descubrimos que la iglesia no sólo está en construcción por fuera, sino tambièn por dentro!!! Es decir, por dentro está completamente inacabada. Obviamente la caja está completa, pero el interior, está plagado de andamios, máquinas, y todo tipo de materiales que muestran que hoy día están trabajando a todo vapor. El techo de la bóveda, fue concebido como un gran bosque de árboles frondosos, como si fuese un bosque de plátanos, con enormísimos troncos largos y erguidos, que a partir de una altura, y luego de un “nudo” se ramifican, igual que la copa de un árbol. El remate, son las “hojas” de los árboles, que asemejan las de una palmera, dejando huecos entre ellas, en forma redonda, donde pasa la luz suavemente.







Las vidrieras o vitreaux son muy hermosas, con variadísimos colores, y con toda una significancia que no podrìa retransmitir. El total del templo es un gran símbolo, y no hay sitio sin decorar, todo con formas orgánicas, porque el arquitecto, Antoni Gaudí, era un amante de la naturaleza. Esta iglesia, junto con la casa Batlló (o de los huesos) y la Pedrera (o casa Millà), son los más notorios exponentes del Art Noveau Catalàn, llamado “Modernismo Catalan”.

Lo màs impactante a mi parecer, al menos de lo ya construido (luego sin dudas lo serà la gigante torre de Cristo que medirá 170 metros de altura) es la fachada de la natividad, que relata el nacimiento de Jesús. El frente de esta fachada parece hecho de arena, un colosal castillo de arena, riquísimamente ornamentado. Las torres (que son 4 en esta fachada) rematan con cruces decoradas en trencadiz, técnica de mosaico realizado con cerámicas y cristales partidos y ubicados de modo artístico. En el lateral, las torres están decoradas con canastas con frutos, de todos los tipos, y todos los colores. Lógicamente, dependiendo del ojo visor, puede parecer una exageración de ornato, o una genialidad surrealista. Yo soy del segundo grupo, porque me generó fascinación. Creo que es imposible relatar con palabras lo que en una imagen se puede explicar de un golpe de vista, porque a primera vista ya te deja sin palabras. Todo es muy original, y muy natural: las gárgolas (para el drenaje del agua) estàn realizadas con iguanas, víboras, etc. Tambièn hay caracoles, camaleones, palomas, gallinas, tortugas, ovejas, hojas de palmera, enredaderas…me resulta imposible recordar todo y transmitir todo lo que vi en oraciones.

Gaudí sólo tuvo ocasión de ver acabada la fachada del nacimiento de Jesús. Este fue el proyecto que le insumiò casi toda su vida; previo a esto hizo las casas que antes mencionè, y el genial Parc Güell. Vivió durante años allí encerrado, y  hasta pidió dinero èl mismo para intentar ayudar para continuar la obra. Todos sus esfuerzos no fueron suficientes para verla terminada…aún hoy falta muchisimo, dirìa que màs de la mitad de la obra!

Luego de ello, nos llegamos hasta la Casa  Milà, màs conocida como la Pedrera. A Gaudí le encargaron este proyecto, y le dieron “carta blanca” en la elección del diseño. Lo hizo a su gusto, sin una sola línea recta, con balcones ondulantes, con rejas de estilo vegetal, y una azotea genial con sus habituales mosaicos, coronadas por chimeneas que imitan soldados con yelmos, los conocidos como espantabrujas. 











Al conocer la casa el pueblo barcelonés, dijo que parecía una pedrera, o cantera, porque la fachada es muy gris. Pero todo lo que no tiene de color, lo tiene de originalidad. Los invito a que disfruten esta magnífica vista 360º, tomada de la página http://www.360cities.net/



Allí tambien la fila era màs que generosa, y el precio de las entradas, tal como en todas los museos y atracciones de Barcelona, son carísimas. Así que nos decidiimos por visitar por dentro la Batlló y no la Milà.

En la Batllò quedè fascinada, como cuando era nena e iba al Italpark, y todo estaba decorado por donde se lo mire, y me causaba asombro y encanto. La casa, como todas las obras, no tiene líneas rectas, y es una especie de alegoria del fondo del mar, donde todo vira al azulado, y respeta el movimiento de las olas el mar, y los remolinos de agua. Las paredes son curvas, los techos y las aberturas tambièn. Todo hecho a la medida, especialmente diseñado, y absolutamente único. Tambièn únicos son los vitreaux que decoran el frente, las làmparas, el patio trasero, el patio interno…tal como antes dije, creo que es preciso enseñar las fotos para poder entender lo bello del conjunto, que parece salido de una historia fantàstica al estilo Verne. 


Fachada de la Casa Batló




Merece una mención especial la terraza, con las chimeneas que se retuercen y decoran el cielo catalàn, y el tejado del frente, que imita un gran dragón, con sus escamas y la columna vertebral, todo de bellìsimos colores. A las fotos me remito, para que vean con sus propios ojos....








                                                                                                                        
De la casa Batlló, partimos en metro hacia el Parc Güell. Originalmente concebido como una ciudad jardín, que Eusebio Güell encargase a su amigo Gaudí, se vio convertida en un parque abierto al público, luego que el proyecto fracasase económicamente y el ayuntamiento barcelonés lo comprase para el pueblo. Desde la estación, caminamos unas cuantas cuadras, en subida, hasta dar con algo bastante infrecuente: escaleras mecánicas para subir la calle. Las calles son tan empinadas, que sería agotador, una especie de escalada para poder entrar al parque. Una vez dentro, hay varios caminos a seguir, todos rodeados de vegetación, músicos, pintores, y todo tipo de artistas, y como marco, las columnatas, bancas, y decoraciones varias que pensara Gaudi.









Tiene varios accesos, pero el principal es el mas genial. Lo flanquean dos casitas al estilo Disney, según dice la folletería, y si bien no fui al parque de yanquilandia, doy fé que estos son super originales, coloridos y preciosos. Cubiertos de trencadiz, o mosaicos de colores, son –como todo lo que hace Gaudí- muy originales, naturales, curvos y orgánicos. Al traspasar el acceso, una escalinata, con los laterales integramente cubiertos de mosaiqueria, y una serie de tres fuentes, con formas animales; una de ellas, la fantástica fuente con un lagarto (o lagarta, por qué no?) con “piel” de cerámicos de color. 




Entrada Park Güell
En la cima de la escalinata, un patio repleto de columnas dóricas, que rematan en un techo abovedado completamente recubierto de cerámicas, muchas de ellas, vajilla domèstica, que forman figuras como por ej, un pulpo.  Realmente merece la pena la visita. Está repleto de gente que pasea para conocerlo, y otra tanta, lugareña, para descansar, y pasear, tomarse algo, o simplemente, asolearse.  No quiero dejar de mencionar la hermosísima vista que se tiene de la ciudad desde el Park; desde la altura, se pueden distinguir perfectamente a lo lejos  la Sagrada Familia, y el edificio Agbar.

Vista aérea de Barcelona, desde el Park Güell

Estuvimos en Barcelona en días de fiesta: domingo de pascuas, y el lunes 5, feriado tambièn, razòn por la que, a la horda de turistas, se suman los barceloneses que salen de casa a dar un paseo por La Rambla, paseo obligado de la ciudad. Es una calle con una peatonal central, y a los lados (luego de cruzar la calle), los locales. En días de fiesta, en Barcelona sólo se encuentran sitios de comida, bebida y recuerderias. El resto, está “religiosamente” cerrado. Así que nos confundimos en la marea de gente, que, va y viene incesantemente por la rambla hacia el mediterráneo, y de allí de vuelta al centro. Así llegamos hasta el mar, para intentar tomar el funicular, pero estaba realmente trasmano, y lo dejamos pasar. La visita a la Boquería, el mercado màs tradicional de la ciudad, nos quedó sólo en el intento, puesto que merced a las fiestas, estaba tambièn cerrado.

Para cerrar la noche, nos llegamos hasta la torre Agbar, un enorme edificio con forma oval completamente vidriado, que por las noches, exactamente a las 21hs, se enciende por completo, quedando iluminado de azul y grana, los colores del barza. 


Torre Agbar




El plan final quedó en el tintero, porque no teníamos màs energía. En la playa, hay un bar de hielo, donde para entrar te dan trajes térmicos, para soportar las temperaturas bajo cero. Según leímos, todo allí dentro es de hielo. Hubiese estado genial, pero ya no nos respondía màs el cuerpo, y al día siguiente, emprendíamos el viaje en auto.

Barcelona, volveré, y seré millones! Barcelona, me encantaste!

jueves, 24 de marzo de 2011

PISA

Sábado 3 de abril:

El dia de hoy fue de puro viaje. Es decir: a partir de ahora -en lo respectivo al Tour- y hasta Madrid, las paradas son pura excusa para llegar al destino final. Haremos 700km por día, conociendo en el camino, como hoy, la ciudad de Pisa, y por la noche Niza. De Niza no tengo esperanzas, porque llegaremos de noche, y como no tomamos la excursión de Mónaco y el hotel está a las afueras, estimo nos dedicaremos a descansar, que bien  nos hace falta.
La típica foto sosteniendo la torre



Callecitas de Pisa

Al mediodía, hicimos parada en Pisa. Allì solo te llevan a ver el conjunto de los tres edificios, iglesia, baptisterio, y el famosísimo campanille. Las construcciones de estilo romànico, estàn allí desde el siglo XI y fueron claramente revestidas con mármoles que han sido saqueados de otros sitios, bien al estilo tano…y te das cuenta porque en horizontal y en vertical, podès ver inscripciones totalmente descolgadas del edificio que decoran.


Una muestra de los mármoles usurpados a otros momumentos


Es decir, la mayoria de lo que se ve reluciente hoy en el país de la bota, reluce gracias a que magullaron los edificios de la època imperial… en éstos se ven las “heridas” sobre los ladrillos, allí donde estaban los ganchos que sostenían los mármoles que recubrian todo, hoy solo quedan agujeros.


El conjunto del Baptisterio, Campanille e iglesia

La famosísima Torre de Pisa




Por lo visto el tema de la falta de respeto por el patrimonio, y el desorden que ellos mismos asumen, es algo que traen en los genes desde muchos siglos (en Roma ves mezclados las ruinas del foro romano, pegados literalmente  a un monumento relativamente nuevo al rey Vittorio Emannuelle. Es todo caòtico y misturado, lo antiguo, lo nuevo, todo como en un desprolijo collage. Asi y todo Roma es una ciudad que es muy interesante de conocer, con tiempo, con una buena guia, y con mucha paciencia).

La torre de Pisa está verdaderamente inclinada, y es muy notorio, comparativamente vièndolo con el nivel de los restantes dos edificios vecinos. Si se observa el lateral de la iglesia, tambièn se puede ver que està algo “quebrada” hacia el centro de la parte màs larga, como si en el centro hiciese un click y tuviese otro nivel. Según se nos explicò, lo que hoy dia hace interesante a la torre, se debiò a un error de càlculo del constructor, pero, paradójicamente, lo que fue mal parido, creciò como un sitio de interès turìstico.  Al parecer estuvo cerrado el acceso casi por una dècada por temor a su caìda, y se reabirió posteriormente a la compensación de las fundaciones hace unos pocos años.


El conjunto de Pisa, donde puede advertirse la inclinación de la Torre




Foto feliz, en Pisa





Como no podia ser de otro modo, te cobraban el acceso a los edificios, pero como nos tuvieron 45 minutos para traernos un calzonne, no hubo chance siquiera de decidir si gastar o no el dinero para entrar a la torre. Al tèrmino del almuerzo, tuvimos que volar hasta el bus, que se nos iba.

La mañana arrancó de furia hacia el desayuno, acomodando verbalmente a una señora que parecía de la segunda guerra, desesperada por servirse antes, como si se fuese a quedar sin comer. Luego, como les conté, el problemita de los asientos en el micro, el cual resolví tambièn hace un rato, ya harta de ver a Dam encogido con las patas como bandoneón. Porque les juro que en estos contingentes, a la mayoria no le importa un bledo del otro. Se arrojan del micro para bajar primeros, y hacen la cola como para la caja PAN para subir al mismo por la mañana. Se tiran el asiento bien para atrás, sin importar si vos estás en la última fila, achicharrado como cartón prensado. La gente tiene un nivel de egoismo enorme, y una madurez propia de infantes de sala de cuatro años. “Yo lleguè primero", "al que madruga dios lo ayuda", "yo me levantè antes”, en fin…me tienen harta, y esto me hace desear mucho màs que llegue el momento de tomar el auto que queremos alquilar, para recorrer solos parte de la penìnsula ibérica. Lástima haber hecho caso de no traer el mate… los asados y el mate, son lo que màs extraño después de la familia y mis gatas. Y un viaje en auto, sin mate, no termina de ser viaje…verdad? Pero el estar solos, sin molestos egoistas ya va a ser todo un avance, y un gran placer hacer al ritmo de uno, al gusto de uno. Si al llegar a Niza tengo Internet, y tiempo, escribirè un rato màs, en caso que pueda ver algo de la ciudad, claro está.

 Salutti per tutti!

domingo, 13 de marzo de 2011

POMPEYA, NAPOLES y CAPRI


2 de abril:
Considerando que en el micro debo resignarme a estar totalmente incòmoda, aprisionada entre el señor de adelante que reclina su asiento y Damiàn, que –totalmente dormido- me está comprimiendo, intentaré escribir con los bracitos encogidos…puesto que dormir, es imposible.

Aprovecharé entonces para contar el dia de ayer, 2 de abril. El despertador sonó a las 4 am, tal como habia contado anteriormente. A las 5am, el bus estaba saliendo con destino a Pompeya.

Acceso a las Ruinas de Pompeya


Luego de unas horas de ruta, llegamos a destino. Allí nos esperaba nuestro guía local, Giovanni, para enseñarnos el lugar. Pompeya se hizo famoso, puesto que allá por el año setenta y pico después de Cristo, el volcán Vesubio, que da marco a esta y otras ciudades vesubianas, explotó.






Moldes en yeso de algunos de los pompeyanos que quedaron cubiertos por la nube de cenizas

Este pueblo, a diferencia de otros de los valles del volcán, no fue cubierto por lava volcànica, sino por cenizas y piedra pómez. Fue así que, muchísimos años después, en ocasión de hacer excavaciones para alguna obra civil, encontraron sumergida bajo la superficie, una ciudad completa.

Baños pompeyanos


Cave Canem (Cuidado con el perro) en la entrada de una casa pompeyana


Allí puede recrearse la vida pompeyana completa. Han excavado una enorme parte, y aún resta un tercio para descubrirlo todo. Claro está, como en la mayoria de los descubrimientos, buena parte de lo encontrado está en museos, por ej, en Nápoles. Así pudimos ver los restos de tiendas, y tambien del foro, de templos, y de casas. 

Las casas con pinturas al fresco que se conservan, pese a la antigüedad y la embestida del volcàn, en muy buenas condiciones. Asi fue que también pudimos ver las termas, baños públicos, donde podían darse baños frios, tibios o un baño sauna, gracias a un sistema de caldera que distribuìa el calor por una doble pared, y un doble piso. Tambièn vimos que los políticos que nos gobiernan hoy día, no inventaron nada. La fuente dentro de los baños termales y el reloj de sol dentro del templo, son “regalos” de los candidatos a gobernador de la época, donde colocaban su nombre, indicaban qué estaban regalando, y hasta el costo de lo adquirido. Todo para que el pueblo esté “orientado” a la hora de la elección.

Propaganda política en las Baños pompeyanos


Lamentablemente, el lupanar –o prostíbulo- estaba cerrado por refacciones. En ese sitio, según tengo entendido, se conservan muchas pinturas al fresco, con “publicidad” sobre lo que se ofrecía en ese sitio, siendo entonces principalmente las imàgenes sobre tematica erótica (creo que es allí donde está la pintura tan famosa de Príapo).

El siguiente punto para conocer, la bahía de Nápoles. Pues què decirles de esta ciudad…de lo poco que vimos, no hay nada que justifique la frase “ver Nàpoles y después morir”. Una característica notoria, es que la gente cuelga sus ropas lavadas en los balcones, y que de no tener éstos, de las ventanas hacia la calle. Está más que claro que no es agradable, es una sensación de estar por un momento en la Boca. Llegando a la bahía, nos esperaba el ferry, que nos llevaría hasta la isla de Capri. El ferry, era uno lo ligero, que demoró unos 40 minutos. Debo decir que Capri es pintoresco, y que el agua es bonita, pero que, en el vecino país de Brasil he visto playas y pueblos mucho más lindos, con aguas màs llamativas, con casas más cuidadas, es decir, un conjunto màs armado, y que me llena más. Es claro que no puedo decir que es feo, porque no lo es, es un muy lindo sitio, pero quizás tenía otra expectativa, de acuerdo a todo lo que uno escucha sobre esta ísola. 

Galeria Umberto I, en Nápoles


No más tocar tierra, nos esperaban unos mini buses, que eran tan literalmente minùsculos como su nombre. Claro está, no nos entraban las piernas, y tuvimos que ponerlas de lado para ir, contando con la suerte que el mismo no estaba completo. Este transporte nos llevó hasta Anacapri, el punto màs alto de la isla, donde almorzamos en un restaurant al que nos llevó el tour. Valoración de la comida y la atención: 3.

Capri vista desde Anacapri

Vista de Capri, desde Anacapri

Vista de Capri desde Anacapri
Aquí me gustaría hacer un paréntesis. Como nieta de italianos, y como ciudadana ahora de este país, me sentí muy defraudada del trato de los lugareños: en los restaurantes te atienden a los apurones, no te traen el pan si no lo pedís, asi como tampoco queso, y siempre, pero siempre, 5 minutos es igual a media hora. De hecho, algunos de los compañeros de viaje tuvieron que pagar el servicio de mesa y levantarse sin comer porque no hicieron a tiempo a darles su pizza antes que se fuese el bus. Yo esperaba una atención màs cálida, con màs esfuerzo por intentar hacer comprenderse, con màs esmero para con el turista, pero no, nada de eso.
 
Lo último de este paseo, fue una salida en lancha para bordear la isla, y poder ver los farallones, enormes piedras que asoman del mar, y el pueblo desde el mar. Esta fue la parte que màs rescato de la salida de ayer, porque el sol nos acompañó todo el camino, y pudimos disfrutar en la cubierta, el sol, el viento, y el color del agua.
Farallones en Capri

Capri


Ci veddiamo!!!

viernes, 4 de marzo de 2011

ROMA

1 de abril::

Si pensaba que nunca se podía empeorar el desayuno, pues me equivoqué. Esta vuelta tocaron unas simil medialunas con mucha esencia, paleta "sanguchera", cafè instantàneo y jugos preparados. Como los desayunos de Madrid, París e Innsbruck, no hay! Jaja

Salimos a la excursión, las llamadas panoràmicas, donde te pasean en bus por toda la ciudad. Tuvimos la suerte de tener una guia italiana, muy instruida y amable, que nos explicó todo con mucho detalle. Al terminar la visita, empezamos una excursión opcional a la basílica de San Pedro y los museos Vaticanos. Esta excursión decidimos tomarla con la empresa, puesto que Roma en Semana Santa, es un hervidero de gente. Si bien ya nos habían advertido en variadas ocasiones cosas que terminaron siendo una falacia (como el Louvre, por ej), esta vez tenían razón. Así que agradecimos haber pagado de antemano esta visita, y con una guia tan a la altura.




Entramos a los museos por la puerta que era para las personas con reservación: la fila de las personas sin ticket era inconmensurable.

Ingreso para visistas con reservacion a los museos Vaticanos

Ni bien entrar, nos entregaron una tarjeta como las del subte, de papel, para con ella pasar un molinete. Así iniciamos la visita, recorriendo muchas de las salas de los museos, con hermosísimas pinturas en los techos que imitan relieves, otras salas –como la de los mapas- con un riquísimo relieve, estatuas romanas y griegas (la diferencia entre una estatua clásica y helénica, las segundas habiendo incorporado expresión –sentimientos- en los rostros).

Cada sala fue muy bella, y muy bien explicada, pero en cierta forma una especie de excusa para llegar a “el” lugar: la Capilla Sixtina, pintada por Michellángelo. La capilla, de cómodas dimensiones, estaba atestada de gente. Asimismo, guardias, gritando a viva voz “silencio” (una contradicción total) y “no fotos”.

Tanto la bóveda del techo, como el frente de la capilla, es decir, el sitio donde el Papa daría misa (es un sitio exclusivo de misas para determinadas personas, una capilla privada del Papa, al cual, si se le antojase denegar el permiso, no podríamos ir más a visitarla) están pintados al fresco, por este genio de la pintura y escultura. Esto significa pintar sobre el “revoque” (quizàs no sea técnicamente un revoque común, no puedo precisarlo) en fresco, y sin chances de hacer retoques ni correcciones. Téngase en cuenta, que se le suma a esto el hecho de que, tanto el techo como la pared principal, estuvieron cubiertas durante un lustro con andamios (la pared principal tardò 5 años en realizarla), razón por la cual no se podía ver el efecto final, hasta terminada la obra. Sumado a eso, el techo de la capilla, se pintò con andamios por sobre  las ventanas, razón por la cual tuvo que trabajar a la luz de las velas, lo que le valió la pèrdida de la visiòn a la madurez. La obra es indescriptible con palabras, así que vamos a las imàgenes:

El techo de la Capilla Sixtina

Es de una perfección que te deja sin habla, y pensar que un solo hombre pintò todo eso ya te conmociona. Nos explicaron las diferentes partes, la divisiòn de la luz y la oscuridad, la creación del sol y la luna, la de Adàn (al que tambièn se piensa que puede estar pasàndole la inteligencia, y no la vida por esa “cuasi” unión de dedos), la de Eva, y mucho màs.

tomada de http://www.woratek.com/2009/12/16/miguel-angel-cerebro-en-la-capilla-sixtina/

imagen tomada de http://www.vigoenfotos.com/roma/vaticano_capilla_sixtina_1.html


En la pared principal, está pintado el Juicio Final. En ese fresco, está repleto de figuras humanas, las cuales fueron recubiertas de ropaje, a posteriori, por parte de otro pintor, del cual ahora no recuerdo el nombre. Por suerte, hoy dia, muchos de ellos fueron devueltos al original luego de la limpieza y restauración, la que tardò màs del doble de la realización.

Hay una linda anècdota que cuentan, que cuenta que un Obispo  (secretario del Papa) se horrorizó por la desnudez de los cuerpos, y transmitió su espanto a Miguel Angel. Éste, no sólo no hizo caso al pedido de cubrir los cuerpos, sino que, ademàs, y a modo de burla pública, lo pintò a  este señor en el àngulo inferior izquierdo, con orejas de burro, en la entrada del infierno, y con una serpiente mordièndole los genitales.

Tomada de la pagina http://musica13.files.wordpress.com/2010/04/capilla-sixtina.jpg
Luego de ello, tuvimos ocasiòn de ir a la cripta donde estàn enterrados los papas. Enterrados es un decir, en tanto los sarcófagos estàn a la vista y al paso, todos ellos de mármol, y la gran mayorìa con una estatua del cuerpo yacente en la parte superior. Sólo la de un papa (creo Pio XV) y la de Juan Pablo II son austeras y de mármol liso.

Por ùltimo, y no sin antes pasar por delante de la guardia suiza, con sus vistosìsimos trajes, entramos  a la basìlica. No por nada dicen y sin exagerar, que es la mayor en tamaño del mundo. 






Es un edificio fastuoso, recubierto INTEGRAMENTE de mosaicos, razón por la que permiten tomar fotos con flash a piaccere, siendo que son incorruptibles. 


Para destacar el gran baldaquino central, y que allì dentro, por ser basìlica, se conservan reliquias, que en este caso son dos cuerpos visibles (momificados y con màscaras de cera) de dos papas que fueron beatificados.


 Próximamente, sería el siguiente Juan Pablo II según dicen, quien subirìa desde la cripta a la basílica, si lo santifican.
Guardia Suiza del Vaticano

A partir de allì estuvimos por nuestra cuenta. Asi fue que fuimos sin pèrdida de tiempo al Coliseo, porque el temor de los agolpamientos de turistas por las pascuas estaba rondàndonos. Tuvimos la suerte que la fila era mìnima, y que en seguida pudimos comprar los tickes, y alquilar dos audioguias para hacer la recorrida. Tal y como el resto de Italia, el audioguia muy mal señalizado, casi totalmente inútil. Hay aquí un concepto de atención al turista bastante extraño, o màs bien carente de tal, puesto que los meseros no te atienden bien, siempre a las apuradas, te cobran hasta por el pan, y son bastante mentirosos…me suena a algo conocido! Las calles de Roma estàn pobremente señalizadas, el sistema de trasporte (aparentemente por la enorme cantidad de ruinas subterràneas) se limita a dos subtes, en cruz, y luego colectivos. Así como en Paris pudimos recorrerla ìntegra, sin pèrdida de tiempo en un dia maratònico gracias a los trenes y subtes, aquí, muy por el contrario, nos la pasamos caminando intentando unir puntos muy distantes entre sì.

Volviendo al Coliseo, o Colosseo como ellos lo llaman (se dice que responde a que antiguamente habia una colosal estatua de Nerón en la puerta), el sitio es enorme y espectacular. El estado de conservación, creo que es milagroso, en tanto los tanos no se han esforzado mucho en ello. Hasta no hace mucho tiempo, uno podía ver imàgenes del transporte pasando por la puerta del mismo, colaborando en la degradaciòn. Asimismo, creo que las visitas debieran ser ENTERAMENTE GUIADAS, puesto que la gente no comprende la riqueza de esta joya arqueològica, y los vez, muy orondos, sentados sobre restos de columnas, para decir un ejemplo.

El coliseo romano
Para entender la magnitud de este anfiteatro, creo que deberemos repasar las fotos, porque es muy grande, y es –tal como la Sixtina- difícil de describir: la zona subterránea a la arena, donde estaban las jaulas, las gradas, los arcos, la arena….no alcanzan las palabras.







A la salida, y muy fastidiados por la falta de señalización para hacer buen uso de la audioguia, tomamos los dos subtes, màs una interesante caminata para llegar al Panteón de Agrippa, esta vuelta, de dìa. Como en el resto de la ciudad, un tapòn de gente esperando ingresar. Estimamos se deberìa a que habrìan oficiado misa antes, porque repentinamente, el tapòn se diluyó y estábamos todos dentro. Este sitio es muy increíble. Que en la època que se hizo, hace màs de 2000 años, fueran capaces de hacer una cùpula de 43 metros de diàmetro, es definitivamente inverosímil. De hormigón colado por entre medio de estructuras de maderas, es una obra imponente. Claro està, lo màs llamativo y genial, es el òculo central, un enorme agujero de 9 metros que te deja ver el cielo. Un lugar imperdible.



El Panteòn, y su òculo central.



Siguiente stop: Foro romano: lamentablemente, llegamos tarde, puesto que cerraba a las 19 hs. Unos minutos màs tarde, y sòlo podès apreciarlo de afuera, que no es poco. El foro està enclavado en PLENO CENTRO, con todos los micros y autos pasando 8 metros màs arriba. Roma es una ciudad construida sobre una antigua ciudad, y todo lo subterràneo es una ciudad del imperio. Es asì que podès ver restos del Foro, la plaza principal donde se desarrollaba la vida romana, en todo el perìmetro: restos de columnas de templos, los basamentos, etc. Espero que tengamos ocasiòn de volver otra vez a hacer esta visita, aunque al menos, desde afuera, la doy por cumplida.




Hasta aquì llego hoy. Es 2 de abril, y hoy hicimos una visita de dìa entero a Pompeya, Nàpoles  y Capri, y estamos agobiados. Nos levantaron a las 4am, mientras en mi ciudad natal eran las 23hs, del dia anterior!.
Espero mañana poder contarles de esta visita. Entretanto, me espera la cama, porque mañana conoceremos Pisa, y dormiremos en Niza, Francia.

Arrivederci, e buona fortuna!